Con algo de demora, el nuevo Gabinete poselecciones se cristalizó esta mañana en el Salón Blanco la Casa Rosada. El presidente Néstor Kirchner tomó juramento a los cuatro nuevos ministros.
Felisa Miceli, quien reemplaza en Economía a Roberto Lavagna, y Nilda Garré, que asumió el lugar de José Pampuro en Defensa, se convirtieron así en las primeras mujeres que encabezan esas carteras. Los otros dos ministerios que tienen desde hoy nuevos titulares son el de Relaciones Exteriores y Culto, en el que Jorge Taiana suplanta a Rafael Bielsa, y el de Desarrollo Social, en el que la Juan Carlos Nadalich asumió el cargo que tenía Alicia Kirchner.
En la previa, el salón de la Casa de Gobierno, que lució completamente lleno, mostró por ejemplo al suspendido jefe de Gobierno porteño, Aníbal Ibarra, saludando con una sonrisa al interino Jorge Telerman.
El Presidente y los ministros salientes y entrantes ingresaron cerca de las 11.20. Con Kirchner en el centro, Lavagna se ubicó en un extremo, al lado de la ex ministra de Desarrollo Social Alicia Kirchner. Miceli prodigaba sonrisas y se llevó, junto con Garré, los mejores aplausos.
Taiana fue el primero en jurar. Luego, la nueva ministra de Defensa juró sólo por la Patria. En el tercer turno llegó Miceli, a quien Kirchner llamó en primer lugar por su segundo nombre, Josefina. Ambos se abrazaron con fuerza. El último fue Nadalich.
Tres de los cambios que se cristalizaron hoy fueron impulsados por los resultados electorales, ya que la hermana del presidente juró el martes como senadora nacional por Santa Cruz, Pampuro debe hacer lo mismo cuando finalice formalmente el escrutinio en la provincia de Buenos Aires y Bielsa fue elegido diputado nacional por la Capital Federal. La modificación en el Ministerio de Economía, en cambio, es interpretado como un ejercicio de autoridad del Presidente.
En general, no se esperan grandes cambios en las segundas líneas de las carteras, aunque todavía restan definir algunos puestos.
En Economía, Miceli reveló ayer los nombres de los secretarios que acompañarán su gestión. La principal novedad la constituyó la confirmación de que el actual secretario de la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, Alfredo Mac Laughlin, ocupará el estratégico cargo de secretario de Finanzas, mientras que Estela Palomeque abandonará su sillón en el directorio del Banco Nación para ocuparse de la Secretaría Legal y Administrativa. Seguirán en sus cargos Oscar Tangelson (Política Económica), Carlos Mosse (Hacienda), Miguel Peirano (Industria, Comercio y Pymes) y Miguel Campos (Agricultura).
Los trascendidos indican que la mayoría de los miembros del Gabinete de Pampuro permanecerá en funciones con Garré y que tampoco habría grandes cambios en Desarrollo Social, donde sí podría haber alguna sorpresa, ni en Cancillería, aunque con la asunción de Taiana queda vacante el puesto de vicecanciller.
Anoche, el ministro de Gobierno bonaerense Florencio Randazzo se reunió con Kirchner y, aunque no hubo información, es probable que Randazzo sea el nuevo subsecretario General de la Presidencia en reemplazo del diputado electo Carlos Kunkel.
«Yo creo que una de las recetas es la convertibilidad«, respondió el ex presidente al ser consultado acerca de la manera de frenar el aumento de precios.
En el mismo sentido, el ex primer mandatario afirmó que «nadie puede negar que la convertibilidad, tal como fue instaurada» por su gobierno, «fue beneficiosa para la mayoría del pueblo argentino».
«Yo creo que la receta está dada por lo que nosotros hicimos durante 10 años de gobierno. Tuvimos prácticamente inflación cero después de haber recibido una inflación de más del cinco mil por ciento anual», argumentó Menem.
Además, el senador riojano planteó que el gobierno de Néstor Kirchner «debe considerar a la inflación porque es un tema que afecta a todos». Y agregó: «Hay que tener en cuenta un aspecto que perjudica a los más humildes».
El ex jefe de Estado hizo estas declaraciones en el contexto de una inflación en alza, que podría pasar el índice anual presupuestado, y apenas un día después de que Kirchner anunciara la creación de una «Liga de seguimiento de precios», un mecanismo de trabajo en el que incluyó a los intendentes de todo el país, a los organismos nacionales y provinciales vinculadas a la defensa del consumidor y a las organizaciones sociales.