La Autoridad Nacional Palestina (ANP) sufre una crisis financiera "sofocante" y llegó "a un límite insoportable", dijo hoy su presidente, Abu Mazen, en una conferencia de prensa en Casablanca, al término de su visita de tres días a Marruecos. El gobierno palestino, encabezado por el grupo islámico Hamas, decidió lanzar una campaña dirigida al mundo árabe a través de Internet.
El presidente de la ANP lanzó un llamado a los países árabes que "anunciaron su compromiso de brindar la asistencia económica debida para los últimos seis meses y los próximos seis meses: esperemos que honren este compromiso lo antes posible, para evitar la catástrofe".
En tanto, Hamas llama a "ayudar a sus hermanos árabes y frustrar las intenciones sionistas de negarles sus derechos legítimos" con donaciones a una cuenta en un banco en El Cairo, informó un vocero del movimiento islámico.
La Unión Europea y Estados Unidos, los principales donantes de la ANP, decidieron cortar la financiación directa después de que Hamas asumió el poder el 29 de marzo. La ayuda económica externa, junto con la restitución de las tasas aduaneras suspendidas el mes pasado por Israel, constituyen la mayor parte de los recursos del gobierno palestino. Así, el movimiento islámico está sumergido en una grave crisis económica y no sabe cuándo podrá pagar los salarios de sus 140.000 funcionarios.
Mazen, que se dijo dispuesto a visitar las capitales europeas para transmitir directamente su mensaje, subrayó que "pedimos a la Unión Europea honrar sus compromisos porque quien depende de esos fondos, comenzando por los más pobres y los niños que van a la escuela, no hicieron nada malo para ver comprometidos sus derechos".