Categorías
POLÍTICA

El MST refutó duramente al periodista H. Verbitsky: “El aparato de propaganda oficial es totalitario y calumniador”

Comunicado de prensa

La Dirección Nacional del MST en el Movimiento Proyecto Sur refutó hoy duramente al periodista Horacio Verbitsky, quien en un reportaje publicado días atrás en la revista Veintitrés habló de “los campos que tiene en Firmat la productora sojera Vilma Ripoll”.

Alejandro Bodart, secretario general de ese partido, afirmó: “Repudiamos las mentiras de ese escriba oficialista. Nuestra compañera Ripoll apoya a los
pequeños productores agrarios y las retenciones segmentadas, pero no es
productora sojera y sus únicas tierras son las macetas de su balcón. Da
vergüenza ajena que, con tal de justificar al gobierno K, el titular de un
organismo de derechos humanos mienta de manera tan lamentable.”

Bodart criticó también las recientes acusaciones del programa 678 por twitter contra Pino Solanas por el accidente ferroviario y el cable de Télam sobre el cumpleaños de la presidenta: “A medida que avanza el desgaste del kirchnerismo, su aparato de propaganda se vuelve cada vez más totalitario y calumniador.”


JOSEPH GOEBBELS / Propaganda nazi

El doc­tor Goeb­bels (29 de octu­bre de 18971 de mayo de 1945) fue el minis­tro de pro­pa­ganda del gobierno de Adolf  Hitler (en ale­mán Pro­pa­gan­da­mi­nis­te­rium) en la Ale­ma­nia Nazi. Fue una figura clave del régi­men, cono­cido por sus  dotes retó­ri­cas, y su capa­ci­dad de convencimiento. Su idea­rio publi­cista era este: ¿Cuán­tos de estos prin­ci­pios siguen  usán­dose para la pro­pa­ganda 100 años des­pués?

La res­puesta al final:

  • Prin­ci­pio de sim­pli­fi­ca­ción y del
    enemigo único.
    Adop­tar una única idea, un único sím­bolo. Indi­vi­dua­li­zar al adver­sa­rio en un único enemigo.

  • Prin­ci­pio del método de con­ta­gio.
    Reunir diver­sos adver­sa­rios en una sola cate­go­ría o indi­vi­duo. Los adver­sa­rios han de constituirse en suma individualizada.

  • Prin­ci­pio de la
    trans­po­si­ción.

    Car­gar sobre el adver­sa­rio los pro­pios erro­res o defec­tos, res­pon­diendo el ata­que con el ata­que. “Si no pue­des negar las malas noti­cias, inventa otras que las distraigan”.

  • Prin­ci­pio de la exa­ge­ra­ción y
    des­fi­gu­ra­ción.
    Con­ver­tir cual­quier anéc­dota, por
    pequeña que sea, en ame­naza grave.

  • Prin­ci­pio de la vul­ga­ri­za­ción. “Toda pro­pa­ganda debe ser popular, adap­tando su nivel al menos inte­li­gente de los indi­vi­duos a los que va diri­gida. Cuanto más grande sea la masa a con­ven­cer, más pequeño ha de ser el esfuerzo men­tal a rea­li­zar. La capa­ci­dad recep­tiva de las masas es limi­tada y su com­pren­sión escasa; ade­más, tie­nen gran faci­li­dad para
    olvidar”.

  • Prin­ci­pio de orques­ta­ción.
    “La pro­pa­ganda debe limi­tarse a un número pequeño de ideas y repe­tir­las incan­sa­ble­mente, presentadas una y otra vez desde dife­ren­tes pers­pec­ti­vas pero siem­pre con­ver­giendo sobre el mismo con­cepto. Sin fisu­ras ni dudas”. De aquí viene tam­bién la famosa frase: “Si una men­tira se repite sufi­cien­te­mente, acaba por con­ver­tirse en verdad”.

  • Prin­ci­pio de reno­va­ción. Hay que emi­tir cons­tan­te­mente informa­cio­nes y argu­men­tos nue­vos a un ritmo tal que cuando el adver­sa­rio res­ponda el público esté ya intere­sado en otra cosa. Las res­pues­tas del adver­sa­rio nunca han de poder con­tra­rres­tar el nivel cre­ciente de acusaciones.

  • Prin­ci­pio de la vero­si­mi­li­tud. Cons­truir argu­men­tos a par­tir de
    fuen­tes diver­sas, a tra­vés de los lla­ma­dos glo­bos son­das o de
    infor­ma­cio­nes fragmentarias.

  • Prin­ci­pio de la silen­cia­ción.
    Aca­llar sobre las cues­tio­nes sobre las que no se tie­nen argu­men­tos y disi­mu­lar las noti­cias que favore­cen el adver­sa­rio, tam­bién
    con­tra­pro­gra­mando con la ayuda de medios de comu­ni­ca­ción
    afines.

  • Prin­ci­pio de la trans­fu­sión.
    Por regla gene­ral la propaganda opera siem­pre a par­tir de un sus­trato pre­exis­tente, ya sea una mito­lo­gía nacio­nal o un com­plejo de odios y pre­jui­cios tra­di­cio­na­les; se trata de difun­dir argu­men­tos que pue­dan arrai­gar en acti­tu­des primitivas.

  • Prin­ci­pio de la una­ni­mi­dad.
    Lle­gar a con­ven­cer a mucha gente que se piensa “como todo el mundo”, creando impre­sión de unanimidad.

Por David Encina

Periodista

Ver perfil en LinkedIn / twitter.com/DavidEncina

Trabajador. Asesoría en comunicación social, comercial y política para el desarrollo de campañas. Análisis de servicios al cliente y al público. Aportes para la gestión de redes sociales con planificación estratégica.

Contacto: mencin@palermo.edu / david.encina@facebook.com / encina_david@yahoo.com.ar/ m.david.encina@gmail.com

Más información ver en David Encina V. - PRENSA.
http://cualeslanoticia.com/prensa/

5 respuestas a «El MST refutó duramente al periodista H. Verbitsky: “El aparato de propaganda oficial es totalitario y calumniador”»

Responder a #Kircherismo / #FrenteParaLaVictoria / #FPV | CELN - ¿Cuál es la noticia...?Cancelar respuesta

Descubre más desde CELN - ¿Cuál es la noticia...?

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo