De acuerdo a lo señalado por sus dirigentes habrían logrado que se reabra en los municipios la inscripción para las cooperativas de trabajo del Programa Argentina Trabaja, que contempla una remuneración de alrededor de $ 1.200 más el pago del monotributo, para tareas laborales de distinto tipo.
Este plan, anunciado pomposamente por Cristina, cuenta con un presupuesto anual de 9.000 millones de pesos y prevé una primera incorporación para este año de 100.000 puestos de trabajo en los municipios del conurbano bonaerense. Es manejado por los punteros del PJ que son los que anotan a la gente, manejan el dinero y funcionamiento de las cooperativas. “Si no sos amigo del intendente o del puntero no entrás” denuncian los compañeros que se han rebelado contra esto. Como decía uno de los carteles que encabezaron la protesta, hacen falta “Cooperativas sin punteros”.
El programa, que tiene pocas semanas de vida,y ya cuenta con serias denuncias sobre punteros intentando quedarse con parte de las remuneraciones de los trabajadores, pretende ser usado con el doble objetivo de reforzar el aparato electoral del PJ y liquidar a las organizaciones sociales territoriales que no comulguen con el gobierno. Como dijo el ministro Aníbal Fernández: “Nosotros somos conscientes de que cuando comenzamos la gestión tuvimos que recurrir a las organizaciones sociales, pero hoy estamos en perfectas condiciones de poder asumir la ayuda” (Infobae digital 03/11/09).
La lucha le cambió los planes al Ministro
Lo contundente del acampe, donde participaron muchos compañeros con sus familias e hijos pequeños, la firmeza con que supieron enfrentar una grave provocación montada en altas horas de la noche por la policía de Fernández y la decidida reacción de muchos compañeros que obligaron a retroceder a la policía, que había golpeado y detenido a 3 compañeros a pocos metros del acampe, logrando su posterior liberación, empezaron a escribir una historia distinta a la que pretendía el gobierno.
La simpatía de millones que viven en la pobreza, de muchos trabajadores que ya no le creen nada al gobierno de Cristina K, que se sintieron identificados con los reclamos por trabajo, fueron también otro apoyo decisivo, para que los compañeros, que recibieron el apoyo de defensores de los derechos humanos como Pérez Esquivel, lograran que el gobierno se sentara a negociar, obteniendo un merecido primer triunfo.
El MST “Teresa Vive” llama a los desocupados y a todas las organizaciones a unirnos para pelear por el trabajo
El aumento constante del precio de los alimentos genera cada día más pobreza, en un país que cuenta con cerca de medio millón de empleos menos en el último año. Los más castigados son los compañeros que trabajan en negro y precarizados. En los barrios escasean las changas y se hace todo cuesta arriba.
Pero, como se demostró en la 9 de Julio o en muchas acciones recientes en el conurbano y en el interior, hay miles, quizás millones… que no quieren vivir de una pequeña ayuda social. Quieren trabajo y están dispuestos a pelear por él, por su dignad de trabajadores y la de sus familias, y no comparten el mezquino plan del gobierno que deja a la mayoría afuera.
Hace falta organizarse en cada barrio, ya que si nos movilizamos podemos ganar. No podemos esperar a la lotería de que alcance con anotarse en las listas del puntero. Son pocos los puestos ofrecidos y la mayoría va a quedar afuera si no pelea. Llamamos a todas las organizaciones de desocupados a trazar un plan de lucha nacional común. Las próximas semanas van a encontrar al “Teresa Vive” en la calle reclamando junto a miles de compañeros por ese elemental derecho que es el trabajo.
Subsidio "universal" por hijo
Es insuficiente, no llega a todos y se lo descuentan a los trabajadores. Ver nota
Viernes 6, 12.00 hs: conferencia de prensa frente al Ministerio de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos (Sarmiento 329, Capital) y presentación del pedido de informes tanto en el Ministerio de Justicia como en la Cámara de Diputados de la Nación.
También exigimos a Aníbal Fernández, Jefe de Gabinete, que explique que quiso decir cuando declaró el día martes que los manifestantes “estábamos buscando una represión”. Creemos, además, que este hecho se enmarca en un contexto en el cual los sectores más reaccionarios del ámbito político y comunicacional reclaman que se endurezcan las políticas represivas hacia las organizaciones populares y los sectores en lucha. Lo que no hace más que recordarnos al clima instalado por los sectores de poder los días previos a la Masacre de Avellaneda, el 26 de junio de 2002.
Invitamos a que se hagan presentes organismos de derechos humanos y compañeros/as de las organizaciones populares.
Para adherir: adhesionesacampe@yahoo.com.ar