Explosiones en dos mezquitas de Janeqin provocaron la muerte a al menos 55 personas, mientras que otras seis fallecieron en otros dos ataques en Bagdad.
En una nueva jornada sangrienta en Irak, cinco atentados en tres ciudades dejaron hoy por lo menos 45 muertos y alrededor de un centenar de heridos.
En la localidad de Janeqin, cerca de la frontera con Irán y 170 kilómetros al noreste de Bagdad, dos suicidas hicieron detonar los explosivos que llevaban encima en dos mezquitas a las que asistían kurdos chiítas causando la muerte de al menos 55 personas y heridas a otras 60, según informaron fuentes oficiales
En ese lugar se decretó un toque de queda mientras la policía y las fuerzas de combatientes kurdos (pashmerga) evacuaban los heridos hacia los hospitales y sacaban de las ruinas a los muertos.
En dos ataques suicidas perpetrados con coches bombas en Bagdad, en tanto, seis personas murieron y 40 más resultaron heridas.
Los atentados se llevaron a cabo cerca del hotel Hamra y del centro de detención de Jadriya y provocaron el derrumbe de varios edificios bajos de la zona, por lo que las autoridades no descartan que aumente la cifra de víctimas.
Un quinto atentado, llevado a cabo también con un coche bomba que explotó en la ciudad de Kanaan, en el norte de Irak, causó la muerte de un adolescente de 15 años y dejó al menos dos heridos. El ataque estaba dirigido contra un grupo de extranjeros que trabajan para las Fuerzas Armadas en esa ciudad.