El gobierno de Kirchner insistirá ante Uruguay en una tregua de 90 días que permita hacer un estudio conjunto del impacto ambiental de las papeleras, a las que la Argentina considera contaminantes. De todos modos, ayer resolvió respaldar al presidente Vázquez, acusar a la empresa Botnia por la suspensión de la cumbre y volver a negociar con los asambleístas de Entre Ríos para que levanten los cortes.
El bloqueo de la ruta 136 resuelto ayer, cuando faltan sólo 8 días para el fin de semana largo por Semana Santa, fue la peor noticia para la Casa Rosada.
“Esto agrava el conflicto. Uruguay nos demandará por el daño y centrará allí el foco del diferendo”, lamentaron ante LA NACION en Balcarce 50. El nudo de la controversia es la instalación de las plantas de pasta celulosa de Botnia (Finlandia) y ENCE (España) en Fray Bentos y la queja argentina por la futura contaminación.
“La discusión debe ser cómo evitamos la contaminación, y eso habíamos logrado hasta ayer. Si ellos no aceptan vamos a la Corte de La Haya. Pero ahora vuelven los cortes”, completó la fuente. El Gobierno había intentado anteayer persuadir a los asambleístas de que el piquete era “el peor escenario” para el país porque debilita la posición negociadora argentina frente a Uruguay.
Los cortes se reanudaron porque Botnia rechazó anteayer suspender las obras por 90 días para someterse a un estudio de impacto ambiental acumulativo, tal como pedía la Argentina. De ese modo, se cayó la cumbre entre Kirchner y Tabaré Vázquez, pese a que ya había un acuerdo técnico entre ambos gobiernos. Botnia anunció que sólo frenaría 10 días las obras, lo que se leyó como un rechazo al estudio ambiental conjunto.
El jefe de Gabinete, Alberto Fernández, intentó ayer desactivar el corte de ruta y les ofreció a los asambleístas una reunión el lunes próximo con Kirchner. Pero no tuvo éxito.
Si bien Fernández, el canciller Jorge Taiana y el gobernador de Entre Ríos, Jorge Busti, habían acordado con los asambleístas anteayer que el lunes se volverían a reunir, la reanudación de los piquetes echa tierra sobre esa estrategia.
Para algunos en el oficialismo, el error del Gobierno es no trabajar más activamente al lado de los asambleístas, en su propio lugar. Por ello, Busti analizaba anoche cómo convencer, en soledad, a los manifestantes de levantar el corte, que es por tiempo indeterminado. Preparaba algunas reuniones de negociación y hasta propuso un plebiscito en Gualeguaychú.
Si bien el plan del Gobierno es la negociación diplomática, la alternativa es dejar correr la denuncia ante la Corte Internacional de La Haya. “Pero con el corte de ruta vamos debilitados a la negociación, porque Uruguay nos demandará por el bloqueo económico”, se lamentó Busti ante LA NACION.
“Es necesario un plebiscito. La asamblea puede ser numerosa, pero Gualeguaychú tiene 80.000 habitantes –dijo en declaraciones a TN–. Los que van a brindar hoy son los dueños de Botnia. El frente se había dividido en Uruguay; lo unimos rápidamente. El corte es un gran error. Debilita los frentes jurídico y diplomático que teníamos.”
En tanto, Alberto Fernández dijo que el conflicto “es un tema delicado”, y el ministro del Interior, Aníbal Fernández, ratificó: “No estamos de acuerdo con los cortes”.
Decisiones
Ayer al mediodía, alrededor de 5000 personas participaron de una reunión en Arroyo Verde, a unos 20 kilómetros de Gualeguaychú, donde la asamblea resolvió por unanimidad el regreso al corte de ruta. Hace dos semanas habían suspendido el bloqueo que mantuvieron durante 45 días, como gesto para permitir una negociación diplomática.
Cerca de la medianoche, los vecinos de Colón resolvían si aplicarán igual medida en el puente a Paysandú.
El jefe del Gabinete acordó ayer con el bloque de diputados kirchneristas que la estrategia oficial será defender a Vázquez para aliviarle la presión que tiene en su país. Botnia y la oposición uruguaya critican la estrategia que habían acordado los gobiernos.
Así las cosas, Kirchner busca cerrar filas con Vázquez y, en cambio, atacar a Botnia. Por ello, Alberto Fernández comenzó la embestida. “Luego de suspender las obras por 90 días, repentinamente cambió su posición y determinó que no se hiciera la cumbre”, dijo. En declaraciones a Radio Mitre, agregó: “Si es verdad, como dicen las empresas, que no contaminarán, entonces no entiendo por qué no hacer ese estudio”, cuestionó.
Más duro fue el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados, Jorge Argüello. Dijo a LA NACION que “Botnia es el único responsable del entorpecimiento del acuerdo”. Y agregó: “No hay que dejar solo a Tabaré”.
De la Redacción de LA NACION
Una respuesta a «Volvieron a cortar la ruta en Gualeguaychú»
[…] / Fuerte reclamo de Kirchner a Finlandia / Uruguay cerró el diálogo con la Argentina / Volvieron a cortar la ruta en Gualeguaychú / Papeleras: vuelven a suspender la cumbre / Papeleras: el documento técnico […]