Icono del sitio CELN – ¿Cuál es la noticia…?

Terremoto en Indonesia: 3500 muertos

Anuncios
La Nación
Poco más de un año después del tsunami: otra catástrofe conmovió al sudeste asiático
El sismo, que sacudió a la isla de Java, causó también 12.500 heridos y 200.000 desplazados y destruyó decenas de edificios

YAKARTA.- Menos de un año y medio después del tsunami que azotó a la región, un devastador terremoto de 6,2 grados de magnitud en la escala de Richter sacudió los alrededores de la ciudad indonesia de Yogyakarta, en la isla de Java, y causó más de 3500 mil muertos, unos 12.500 heridos y 200.000 desplazados.

El terremoto se produjo a las 5.54 hora local, mientras la mayoría de los habitantes del lugar aún dormían. El epicentro se ubicó en el mar, a sólo 37 kilómetros al sur de Yogyakarta, una ciudad antigua situada a unos 400 kilómetros al este de la capital de Indonesia, Yakarta.

Esta catástrofe es la peor que vive el archipiélago indonesio desde el tsunami del 26 de diciembre de 2004, que dejó unos 130.000 muertos en Indonesia y más de 220.000 en todos los países afectados.

El fuerte temblor derribó casas, hoteles, un hospital y edificios del gobierno, e hizo que la gente saliera corriendo a las calles. Muchas carreteras y puentes quedaron destruidos, lo que obstaculizó los esfuerzos de la población de huir en vehículos e impidió que camionetas cargadas con heridos pudieran llegar a los hospitales.

Yogyakarta es una gran ciudad universitaria, en una región densamente habitada, a poca distancia del volcán Merapi, que actualmente está en actividad. El corazón de Java es también una zona turística conocida por el palacio del sultán, los templos hinduistas de Prambanan y el #templo budista de Borobudur, el más grande del mundo.

En el distrito de Bantul, uno de los más afectados, los rescatistas intentaban sacar cadáveres de entre los escombros mientras los residentes excavaban tumbas colectivas y pilas de cuerpos esperaban ser enterrados bajo un sol abrasador.

Subarjo, un vendedor ambulante de 70 años, se lamentaba junto al cadáver de su mujer: «No pude ayudarla», manifestó. «Estaba intentando rescatar a mis hijos… y la casa se cayó».

La cifra de muertos puede ser aún mayor debido a las tareas de remoción de escombros que realizaban los equipos de socorristas y también porque los heridos esperaban varias horas antes de ser atendidos en los desbordados centros hospitalarios, que trataron a miles de pacientes afectados por el sismo.

Miles de desplazados

La Cruz Roja Internacional informó que por lo menos 200 mil personas resultaron damnificadas por el sismo, y que estas personas temen regresar a sus casas por el riesgo de réplicas. Según esta entidad, el terremoto también ha causado más de 12.500 heridos y ha destruido más de 4000 viviendas.

Decenas de testigos contaron que cientos de edificios quedaron destruidos en el poblado de Yogyakarta. «La gente gritaba: «¡Tsunami, tsunami!» y corría descalza, [huía] en bicicleta, moto, en becak [bicitaxi]. El pánico duró entre media hora y tres cuartos de hora», declaró Pauline Texier, de 24 años, investigadora francesa que se encontraba en el lugar. Muchos, por temor a un tsunami, se trasladaron hacia terrenos más altos, y el miedo anoche no había desaparecido.

Según la Cruz Roja y la Media Luna Roja, entre el 70 y el 80 por ciento de los edificios de la población costera de Bantul, incluido el hospital, se han derrumbado por el sismo.

Las comunicaciones telefónicas quedaron cortadas o con desperfectos, así como el suministro eléctrico, según el jefe de la policía de Yogyakarta, Ari Purnomo. Además, la sala de espera del aeropuerto local quedó destruida, por lo que se cerró el aeródromo.

Mientras caía la noche en el centro de la principal isla indonesia de Java, miles de personas se preparaban para dormir fuera de sus casas destruidas o en los pisos de mezquitas, iglesias o escuelas.

«Está muy oscuro. Tenemos que usar velas y estamos sentados afuera. Tenemos demasiado miedo para dormir adentro. La radio sigue diciendo que habrá más terremotos. Todavía sentimos los temblores», dijo Tjut Nariman, que vive en las afueras de Yogyakarta.

El sismo se registró cerca del volcán Merapi, que mantenía a la isla en alerta máxima desde hace semanas y cuya actividad podría haberse incrementado a raíz del terremoto. Desde el Departamento de Vulcanología de Merapi se indicó: «Tras el sismo, hay más humo que sale del cráter».

Hospitales desbordados

En tanto, miles de personas eran asistidas en seis hospitales de la región, que tienen su capacidad colmada, e incluso las ambulancias que llegan a los centros de salud debían aguardar permiso de entrada, estacionadas en la periferia.

Un médico del Bethesda Hospital, el más grande de Bantul, dijo del centro: «Está en total emergencia; no hay camas disponibles, y los heridos son colocados en los corredores. Muchos de ellos están en graves condiciones».

Indonesia fue uno de los países más afectados por el tsunami desatado por un terremoto de 9 grados de magnitud en la escala abierta de Richter, con epicentro en Sumatra, el 26 de diciembre de 2004, que afectó la región del sudeste asiático, donde murieron por lo menos 220 mil personas y 43.927 son reportadas hasta hoy como desaparecidas.

Salir de la versión móvil